
En el Departamento de Adultos Mayores, nos proponemos trabajar sobre una re-
evaluación de los problemas de este campo, dado que con el aumento de la
población de edad madura se ha producido una toma de conciencia cada vez
mayor en los psicoanalistas de la necesidad de investigar más profundamente los
conflictos que se plantean en los procesos de envejecimiento.
Las respuestas a dichos estudios realizados por psicoanalistas en el mundo entero
se han visto condicionados por prejuicios sociales en relación a las posibilidades
de cambio de estos sujetos. Algunas de estos pre-conceptos se basaron en el
supuesto de que las defensas en las personas de edad avanzada son tan rígidas y
las necesidades instintivas se hallan tan disminuidas que existen insuficientes
motivaciones para el cambio.
Nosotros pensamos en un enfoque “psico-socio- biológico”, que contemple los
cambios en la estructura familiar, los avances tecnológicos, las nuevas
modalidades vinculares, así como aquellos que se generan por el paso del tiempo.
En este espacio, tomaremos en consideración los problemas teóricos-técnicos
surgidos en el tratamiento de los pacientes de edad avanzada, así como las
herramientas que nuestra teoría nos ofrece para su abordaje.
Las consultas son cada vez más frecuentes y es imprescindible el diálogo con
otras ciencias para poder dar respuestas adecuadas que consideren los factores
limitantes que pueden condicionar intervenciones terapéuticas.
Estas ideas pueden ser también el comienzo de una serie de contactos e
intercambios entre psicoanalistas, padres, abuelos y otros profesionales.